trick or treating?

Halloween

Poco queda en el Halloween actual de la antigua festividad celta del Samhain en la que se celebraba el final del verano, la cosecha, en definitiva el año nuevo celta. La creencia popular era que durante esta noche la linea que separa el mundo de los vivos del mundo de los no vivos era muy fina y los espíritus, tanto benignos como malignos, podían atravesarla fácilmente. En esta fiesta se honraba la memoria de los antepasados mientras se trataba de repeler a los espíritus malignos; se cree que el uso de máscaras y disfraces atiende a la necesidad de protegerse durante esa noche adoptando la apariencia de espíritus malignos para de esta manera no ser dañados por ellos.

Los romanos que tenían una gran facilidad para asimilar deidades, ritos, creencias... y sobre todo fiestas, no les costó mucho trabajo incluirla en su calendario, entroncándola con los ritos en honor a Pomona (Diosa de los árboles frutales) que se solían celebrar por las mismas fechas... Con la llegada del Cristianismo muchas festividades paganas fueron... como decirlo... hábilmente sustituidas por cultos de características similares pero de profunda raíz cristiana, así en tiempos del Papa Gregorio IV se trasladó al 1 de noviembre la festividad de Todos los Santos que inicialmente se celebraba el 13 de mayo.

La palabra Halloween deriva de la expresión inglesa "All Hallows' Eve" (víspera de Todos los Santos) y es originaria de los países anglosajones... Se populariza en Estados Unidos a partir de la fuerte inmigración irlandesa tras la hambruna de 1840. Desde Estados unidos se ha contagiado a todo el mundo a través del cine y la televisión... Algunas teorías en etología humana dicen que aquello que vemos por televisión lo asimilamos como real; para nosotros pueden ser más reales las aventuras de James T. Kirk a bordo de la Nave Estelar Enterprise, que reuniones al mas alto nivel de jefes de estado, porque a Kirk lo hemos acompañado pero a lo otro somos ajenos. De esta manera, tras el bombardeo masivo que los "mass media" hacen del modo de vida y cultura americanos, muy pronto asimilaremos estos como propios, como demuestra el aumento de popularidad de fiestas como el Halloween; dentro de poco celebraremos también el Thanksgiving (pero mi opinión sobre esta fiesta la dejo para otro post).

Y... ¿qué queda hoy de la fiesta original? pues más bien poco, solo un cierto apego a lo tétrico y fantasmagórico... Al parecer este año no ha sido muy evidente porque las temperaturas no eran demasiado agradables pero suele ser una fecha en la que se aprovecha para dar rienda suelta a la libertad y al libertinaje, la excusa perfecta para quitarse ropa y enseñar carne... eso si, ya sabéis que los norteamericanos son famosos por su pudor, chicas, podéis enseñar las tetas pero los pezones tienen que ir tapados, igual si los pintáis de negro ya cuela.

Para ir terminando os voy a presentar a Sofi. Sofi es un avestruz de mirada triste que así en el último momento y casi por un pronto se convirtió en mi excusa de Halloween, en mi hacer el ridículo, en mi pasárselo bien, en definitiva en mi intento de camuflarme e integrarme en la cultura que ahora mismo nos rodea, cual cazador que se cubre con cueros no curtidos cuyo hedor pueda enmascarar el propio  para que las presas no perciba su presencia hasta que ya sea demasiado tarde. Halloween en la gran ciudad no tiene mucho de especial, si me impresionó la fiesta a la que hacen referencia las primeras imágenes de este post, Death Metal en directo y esos individuos vestidos de blanco en un entorno viejo y descuidado que te hacía sentí como si estuvieras entrando en el inframundo, muy tétrico todo... Por lo demás, mucha gente... mucha gente en el metro, mucha gente por la calle, mucha gente en las discotecas, muchos taxis y ninguno quería llevarnos... 

La noche terminó en un albergue en pleno centro de Manhattan dónde por 49$ la noche te permiten compartir habitación con tres personas más, y quizás con más seres vivos no personas (Julio, no te engañes, no es época de mosquitos) con derecho a ordenadores conectados a Internet, un baño, una ducha y un poco más que palangana y espejo en el pasillo.

Por cierto... Disfráz popular este año, el de minero chileno... CHI, CHI, CHI; LE, LE, LE; LOS MINEROS DE CHI-LE. No me ha quedado muy claro si esta gente era la peña del Madrid o del Barça, pero para el caso que le hago yo al furgol también me da igual...

Y para despedirme la imagen en Times Square, donde nos convertimos en la atracción turística y blanco de los objetivos y los flashes de guiris y propios que solicitaban amablemente nuestro permiso, o lo hacían a escondidas, para sacarnos fotos. Orgulloso, con mi sombrero de saldo de 3.99$, me despido y en compañía de la Sofi los saludos de rigor... besines para ellas y abrazos para ellos.